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La balada de los unicornios
Ledicia Costas

Anaya
Reseñas de novedades El Templo#66 (octubre 2018)
Por Gabriela Portillo
6.260 lecturas

Ágata se deseperaba con el funcionamiento de la Escuela de Artefactos y Oficios. Sus logros eran más que meritorios para que la reconociesen como Genia; incluso creó a Tic Tac, un robot más humano que muchas personas que lo rodean. Pero la directora se empeñaba en ponerle piedras en el camino. Cornelia, que además es su tía, orquestaba a plena luz del día esa dictadura escolar junto a su banda de arañas de ojos rojos e hipnotizantes.

Solo Ágata sabe lo que Cornelia hace en las sombras, y ya no tolerará más sus prácticas de magia negra, tan oscura como sus cuervos espías. Ha encerrado a León, su mejor amigo, para extraerle la magia y, para colmo, se ha aliado con el asesino que aterroriza Londres. Tras él solo quedan los cuerpos desgarrados de sus víctimas, siempre mujeres de la calle.

No seremos nosotros quienes te destripen la historia, pero habrás reconocido la conjunción de elementos reales y ficticios. Ambientada en una escuela en el Londres victoriano, en la que los alumnos aprenden mecánica de cuerpos o engranajes, entre otros, La balada de los unicornios se destaca como una sólida incursión en el steampunk. La autora no se limita al esquema clásico y añade nuevos elementos que diferencian su libro de tantos otros internados juveniles mágicos: recorreremos escenarios de cuento, con descripciones pictóricas de imaginación desbordante. Conoce por ti mismo la Ciudad de los Perros, el País del Gigante o a Wendy, la Reina Albina.

Ledicia Costas ha creado un mundo tan apasionante, condensado en menos de 200 páginas, que esperamos que no lo abandone aquí, porque queremos seguir explorándolo, ya sea de la mano de Ágata o de cualquiera del resto del interesantísimo elenco.

Piensa dos veces antes de desaprovechar esta oportunidad, no es común que unicornio se deje acariciar...