Bienvenidos a La Estrella, un mundo en continuo cambio. Literalmente. Puedes despertar en mitad de un desierto con un cielo espléndido, pero nadie te asegura que, a media tarde, el lugar no se vaya a convertir en una espesa selva o en un prado verde, en una laguna azotada por una tormenta o en un helador páramo nevado. Nadie te asegura tampoco que, cuando acabe el día, sigas vivo.

Lan tiene diecisiete años y nunca ha salido de los Límites Seguros, el único lugar donde, cuando se rompe la Quietud, se está a salvo. Sin embargo, durante una de las metamorfosis del planeta, la chica decide arriesgar su vida y correr a salvar a un niño perdido. Desorientada, Lan queda atrapada en mitad de la catástrofe con las consecuencias que ello conlleva: perderse, morir... o volverse loca, hasta que, de la nada, aparece un muchacho de ojos plateados que logra rescatarla y llevarla de vuelta al poblado, a salvo. A partir de entonces dará comienzo la odisea de Lan por encontrar una cura para su planeta en la que no sólo tendrá que enfrentarse a los peligros de su mundo, sino también a su pasado, a las reglas establecidas... y a sus sentimientos encontrados.

Javi Araguz es un nombre que muchos conocerán por su saga de El Mundo de Komori o su trabajo como diseñador e ilustrador. Esta vez se une a Isabel Hierro para dar vida a un planeta cambiante y a una historia repleta de aventuras y acción que les convirtió en finalistas del primer Premio As de Picas.

Con un estilo claro y ágil, los autores recrean una aventura repleta de vicisitudes en la que se entrelazan temas como el cuidado de la naturaleza, la importancia de no perder nunca la esperanza o la necesidad de imponerse a los cánones establecidos. A pesar de tener ciertos tintes de ciencia ficción, la ambientación que Araguz y Hierro describen sitúa al lector en un mundo devastado que prácticamente está volviendo a renacer en pequeños clanes donde lo tradicional y lo moderno se dan la mano.

Una de las cosas más reseñables, además de la fuerza de su protagonista, es la relación entre Lan y el chico misterioso: tiene el ritmo perfecto y no pierde la coherencia en ningún momento, como sí ocurre en otras historias similares donde el romance sucede demasiado deprisa. Con todo, nos hubiera gustado un desenlace menos precipitado y algo más cerrado, ya que son bastantes las tramas secundarias que quedan abiertas, tal vez, para un segundo libro.

Como último apunte, sólo mencionar que aunque la portada está claramente dirigida a un público juvenil-adulto, creemos que la historia, debido a los diálogos, a las situaciones cómicas y a las criaturas tan pintorescas que describen los autores, gustará mucho más a los primeros lectores de juvenil.

¿Estás dispuesto a perderte en La Estrella y perseguir tus sueños más allá de los Límites Seguros?