Los días de Ellie, una chica de dieci­siete años, son completamente normales. Le gusta divertirse y pasar tiempo con sus amigos. Sin embargo, las noches son dife­rentes. Tiene horribles pesadillas en las que lucha contra monstruos que intentan devorarla y eso la tiene desconcertada.

La noche de su cum­pleaños, un chico misterioso llamado Will despierta unos poderes dormidos en Ellie. Además, le revela que ella es, en realidad, la reencar­nación de una antigua gue­rrera que luchaba contra los reapers, criaturas sobrenatu­rales que matan a los huma­nos para robarles el alma; y él, un ser inmortal cuya úni­ca misión es protegerla en la batalla.

¿Batalla? Sí, Ellie se encuentra de pronto en medio de una guerra entre án­geles y caídos, pero su mayor preocupa­ción es Bastian, un temible reaper que quiere acabar con ella para siempre y que ha contratado a un asesino para hacerlo; uno que ya lo consiguió en el pasado.

Pero el afán de Bastian por acabar con ella no termina ahí, ya que está dis­puesto a provocar el fin del mundo con tal de evitar que Ellie vuelva a reencarnarse. De modo que ella tendrá que enfrentarse a un ejército de esas monstruosas cria­turas para salvar al mundo y a sí misma, mientras se afana por recuperar los re­cuerdos de su antigua vida.

Angelfire es la primera parte de una trilogía escrita por Court­ney Allison Moulton y publica­da por HarperCollins en 2011. En ella, Moulton nos presen­ta una historia que intenta ser diferente y original, con un mundo oscuro y cruel. Se mantiene al margen de cono­cidas criaturas paranormales creando un nuevo orden al­ternativo, con buenas dosis de romance y acción, personajes bastante creíbles y divertidos, una trama entretenida y fácil de leer y un final que te deja­rá con ganas de saber más.

La segunda parte, Wings of the Wic­ked, se ha publicado este año en EE.UU. y la tercera, aún sin título, se espera para 2013. En España, aún no hay noticias de una posible traducción, pero si os atrevéis con el inglés, Angelfire es una buena pro­puesta para entreteneros durante esos días de verano que cada vez están más cerca.