En un planeta llamado Midgard, donde conviven seres procedentes de todos los mundos, se encuentra la Ciudad Medialuna. Es una ciudad vibrante, despierta, dividida en sectores y habitada por miles de criaturas agrupadas en Casas.
Allí vive Bryce Quinlan, una chica de 23 años despreocupada y un tanto irresponsable, que dedica cada rato libre a salir de fiesta con su mejor amiga, Danika. El alcohol, las drogas y el placer son los únicos que tienen control sobre sus decisiones… Hasta que un día vuelve a casa colocada y descubre que Danika y su manada de lobos han sido despedazados por un demonio.
Ese día algo se rompe dentro de Bryce. Una luz se apaga. Y solo cuando el culpable está entre rejas intenta seguir con su vida. Pero cuando dos años después hay un asesinato idéntico al de sus amigos, Bryce no duda en unirse a la investigación. Para ello tendrá que colaborar con Hunt Athalar, un ángel caído condenado a la esclavitud también conocido como Umbra Mortis, el asesino personal del gobernador.
Sarah J. Maas nos transporta a un universo completamente nuevo que, aunque presenta paralelismos con algunas historias de nuestro mundo, constituye una original mezcla de costumbres, tradiciones y criaturas fantásticas. Sin embargo, la ambientación es tan extensa que es difícil sumergirse de lleno durante los primeros capítulos, y a veces se echa en falta un glosario o un mapa de la ciudad.
A pesar de eso, este libro tiene muchos puntos fuertes. Uno de ellos es la acción: conforme las páginas pasan, la investigación que hila la novela se hace más y más compleja, y el suspense y la tensión crecen hasta llegar a un final lleno de sorpresas. Otro es el romance entre los protagonistas: a lo largo de casi ochocientas páginas les podemos conocer a fondo, conectar con ellos, además de ver cómo ambos se convierten en alguien en quien apoyarse. Y es que en Casa de tierra y sangre hay muerte y dolor, pero también lecciones importantes como la superación de la pérdida y la fortaleza de dos personas que se quieren.
Este libro gustará tanto a los fans de Sarah J. Maas como a los que lean por primera vez a esta autora, y una vez que se adentren en las calles de Ciudad Medialuna, no podrán salir hasta la última página.