Elisa es la portadora de la piedra divina de esta generación. Cada cien años, Dios elige a un portador de la piedra y esta aparecerá en su ombligo el día de su consagración. Todos los portadores tienen una misión que cumplir aunque no saben cuál es, y tienen cierta tendencia a morir en la adolescencia.
En parte por eso, la vida de Elisa, princesa de Orovalle, corre peligro, y su padre la casa con Alejandro de Vega, el rey de Joya del Desierto para protegerla. Como parte del acuerdo matrimonial, Orovalle ayudará a Alejandro proporcionándole tropas en su guerra contra Invierne.
Elisa, que solo tiene dieciséis años pero es toda una erudita, es también una muchacha insegura, con tendencia al sobrepeso y completamente ajena a la vida social palaciega. Una vez que llega a Brisadulce, la capital de Joya del Desierto, su vida se vuelve tediosamente aburrida, aunque encuentra refugio en el monasterio y en sus estudios.
Pero Alejandro no es capaz de cumplir la promesa que hizo y Elisa es raptada y arrastrada a través del desierto hacia una de las provincias fronterizas con Invierne. Allí, un grupo de rebeldes y refugiados planean su independencia del reino de Brisadulce, puesto que el rey les ha dejado a la merced del enemigo. Sin proponérselo y demostrando unas dotes de liderazgo que ella misma no sabía que tenía, Elisa liderará a este grupo de disidentes en una guerra de guerrillas contra el invasor.
La autora Rae Carson debutó en la literatura juvenil en 2011 con esta novela de literatura fantástica clásica. Con un planteamiento original y un escenario tan exótico como el desierto, en La chica de fuego y espino no solo viajamos por el reino de Elisa, sino que también la acompañamos en su crecimiento personal.
Se podría decir que la novela peca del síndrome de «contar mucho y mostrar poco». Puede que esto se deba a que está narrada en primera persona, sin entrar en muchos detalles, o a que La chica de fuego y espino es la primera parte de una saga y, aunque no lo parezca a simple vista, es muy introductoria. En este primer volumen se plantean muchas preguntas, pero se dan muy pocas respuestas.
Si hay algo destacable de este libro, aparte de su originalidad, es que sienta unas bases firmes para sus continuaciones. Esperemos que la editorial decida por fin traer a España su segunda y tercera parte, The Crown of Embers y The Bitter Kingdom, para poder leer todas las aventuras de Elisa como portadora de la piedra divina y reina de Joya del Desierto.