Después de entrevistar en este mismo número a Elizabeth Eulberg, seguro que estás deseando saber más acerca de la última novela que ha publicado en nuestro país.
En A dos centímetros de ti, Eulberg nos cuenta la historia de Levi y Macallan, un chico y una chica que se conocen desde la infancia, y de cómo su amistad evoluciona a lo largo de su adolescencia. Desde que son completamente inseparables, hasta cuando Macallan se echa novio por primera vez, pasando por la etapa de «chico de oro» que hará que Levi se vuelva insoportable, todo mezclado con la, en ocasiones complicada, situación familiar de Macallan.
¿Pueden un chico y una chica ser mejores amigos? ¿Acaba inevitablemente la amistad convirtiéndose en algo más? ¿Compensa arriesgar la mejor amistad del mundo a cambio de un romance incierto? A través de las voces alternantes de Levi y Macallan, Eulberg intenta dar respuesta a estos interrogantes en una novela que engancha desde la primera página. Bien es cierto que la autora nos tiene mal acostumbrados: como siempre, los protagonistas de la novela están perfectamente diseñados, y su «normalidad» despierta en seguida la simpatía del lector.
La historia se desarrolla con bastante rapidez, y eso teniendo en cuenta que la relación entre estos amigos acaba siendo una auténtica odisea: cuando el lector piensa que por fin han superado un obstáculo, llega la autora y le da una vuelta de tuerca al argumento. Dicho esto, queda bastante claro que A dos centímetros de ti no es apta para lectores que ansíen relaciones simples y soluciones fáciles. No es exactamente un melodrama telenovelesco pero, como la vida misma, el amor siempre es complicado.
Una de las cosas que más nos han gustado es que Eulberg ha sabido emocionarnos (y a veces también ponernos de los nervios) ayudándose de situaciones completamente cotidianas en la vida de dos adolescentes. La autora no recurre a grandes dramas familiares ni al consumo de drogas ni a un gen vampírico para llevar a los lectores a devorar las páginas de la novela.
Lo último que nos queda por decir es que es muy difícil terminar esta reseña sin destripar el desenlace, así que pondremos punto y final diciendo que A dos centímetros de ti es una novela adictiva, escrita con un estilo divertido y que a buen seguro endulzará estas últimas tardes de verano a aquel lector que se atreva a disfrutar de su lectura.
Por Lucía Gayo