Johannes Vermeer es uno de los pintores más misteriosos de la historia del arte. Sus cuadros, disgregados por todo el mundo, cuestan miles de euros y han tratado de ser robados en multitud de ocasiones. 

Frank Lloyd Wright fue arquitecto. Su casa de la cascada o el museo Guggenheim de Nueva York son algunas de las obras de este fabuloso artista. El maestro del suspense Alfred Hitchcock utilizó una de sus casas en Con la muerte en los talones. 

Las esculturas de Alexander Calder también están a lo largo del mundo. Colores, formas y movimiento se unen en sus obras creando unas estructuras extrañas, casi oníricas.

El enigma Vermeer comenzó con tres cartas entregadas a medianoche en tres puntos distintos de Chicago. Con el robo de Mujer escribiendo de Vermeer. Con Calder y Petra, dos chicos de once años excepcionalmente inteligentes que tratarán de encontrar el cuadro y descubrir quién les envió las cartas en las que se apuntaba que, a lo largo de los siglos, se había cometido una gran equivocación con el pintor holandés. A través de inteligentes rompecabezas que traen de cabeza a los agentes del FBI, los dos jóvenes intentarán resolver el misterio de quién está detrás de la desaparición del retrato.

Años después llegó El misterio de la casa Robbie, una de las casas más famosas del arquitecto Frank Lloyd Wright. Tommy, el mejor amigo de Calder, observa una sombra en el interior de la construcción, cerrada al público, desde la ventana indiscreta de su cuarto. Balliett realizó un homenaje al cine de suspense y a la arquitectura en esta obra que puso contra las cuerdas a los tres adolescentes. 

Finalmente, a principios de la década se publicó El juego de Calder, donde Calder —el personaje de Blue Balliet— se enfrentaba al juego de Alexander Calder, el escultor. Esta vez, la intriga llevará al joven hasta un pequeño pueblo de Oxford, donde desaparecerá sin dejar rastro. Petra y Tommy, desde Chicago, intentarán resolver el misterio y descubrir dónde está su amigo, que podría encontrarse en peligro mortal. 

El cuarto y último libro hasta la fecha, Pieces and Players, nunca llegó a publicarse en nuestro país. 

Un robo, un allanamiento y una desaparición. La escritora estadounidense Blue Balliett publicó con Salamandra una tetralogía llena de misterio, matemáticas y filosofía. ¿Te suena árido? Todo lo contrario. Divertida y muy inteligente, la saga de El enigma Vermeer fue una de las novelas juveniles más vendidas a principios del siglo XXI. 

Lector, ¿sabes lo que es un pentominó? Son instrumentos matemáticos, una serie de figuras geométricas formadas por cinco cuadrados. Cada una representa a una letra y, juntándolas, se pueden formar muchísimos rectángulos, como hace Calder, que nunca se separa de su juego. Gracias a ellos, el lector es otro investigador más: las fabulosas ilustraciones de Brett Helquist (conocido por ser el dibujante estrella de Una serie de catastróficas desdichas) esconden estos símbolos, muy importantes para la trama. La autora británica, en simbiosis perfecta con el ilustrador, construyó cuatro aventuras interactivas para adolescentes, maduras y con unos giros de trama espectaculares. El acercamiento del arte, el cine y la literatura a los jóvenes, unido a unos personajes frágiles y con poco de superhéroes, unas ilustraciones preciosas y una prosa concreta y pulida, sustentó el éxito de El enigma Vermeer, cuyo primer libro, publicado por primera vez en 2005, tuvo cuatro reimpresiones en nuestro país. 

Blue Balliett se transforma en una malabarista de la ficción en esta saga y juega con el misterio, la amistad, la filosofía y la lógica, logrando la fórmula perfecta: los libros de esta saga no son didácticos, pero dejan un poso de conocimiento muy fuerte al acabarlos. Así, la autora demostró una vez más que las letras y las ciencias son más que complementarias: el arte y las matemáticas jamás estuvieron tan unidos como en las aventuras de estos tres jóvenes investigadores.

Mucha tristeza nos provoca ver títulos tan recientes descatalogados, pero El enigma Vermeer puede seguir muy vivo. Pocas bibliotecas no albergan un ejemplar de las aventuras de Calder, Petra y Tommy. Únete a ellos como un investigador más y descubre que el arte, las matemáticas y la filosofía son apasionantes, y más si están acompañados de buena literatura. Blue Balliett te invita a investigar en esta saga. Nosotros, también.