A la novia de Jake le espera un largo viaje por carretera. Él insiste en que conozca a sus padres y la granja en la que se crio. Durante el camino, tendrá tiempo de sobra para reflexionar acerca de su relación, su novio y ella misma. Es invierno, la nieve dificulta el trayecto y existe el riesgo de que la ventisca no los deje volver a casa. Lo único que quiere es que todo aquello acabe cuanto antes. Al fin y al cabo, Jake y ella ni siquiera llevan juntos tanto tiempo, ¿no?
Con esta información tenemos más que suficiente para adentrarnos en Estoy pensando en dejarlo. Lo que a simple vista parece un drama de pareja, en realidad es una historia de terror y misterio. Esta sería solo una manera de etiquetarla, porque lo cierto es que tiene muchas capas y resulta un tanto inclasificable.
Estoy pensando en dejarlo es una novela sobre la soledad. La soledad que siente la protagonista, que se encuentra en el coche, a escasos centímetros de la persona a la que supuestamente ama; un sentimiento que con los años puede convertirse en el mismo que siente, por ejemplo, el viejo conserje de un instituto que no tiene pareja, amigos o hijos. En otras palabras, algo peligroso.
A lo largo de la novela, el autor nos muestra imágenes extrañas y recuerdos escalofriantes. Ya desde las primeras páginas intuimos que algo va mal. El ambiente siempre es tenso, los personajes sufren continuas contradicciones en su personalidad, los lugares que visitan son inquietantes..., aunque no sabríamos explicar por qué. Parece que hay algo que se nos escapa. Y es que el autor, Iain Reid, siempre va unos pasos por delante. Pero a medida que avanzamos en la lectura, la niebla se disipa y las piezas encajan.
Estoy pensando en dejarlo es un libro que dejará la cabeza del lector llena de posibilidades y teorías. Si lo leyésemos por segunda vez, nos encontraríamos ante una novela completamente distinta. Quizá no sea para todos los públicos, pero es ideal si buscas algo oscuro y diferente. Además, Netflix estrenó la película a principios de septiembre, dirigida por el reconocido cineasta Charlie Kaufman.