Una noche, la luna no sale.

Los días pasan, pero ni rastro de ella. Es como si hubiera huido del cielo. La gente empieza a olvidar el último día que la vio, y su recuerdo empieza a quedar cada vez más lejano en el tiempo.

Esto sucede cuando la diosa Selene abandona a sus criaturas, los licántropos. El fenómeno los debilita en el acto, no solo dejándolos sin fuerzas, sino también sin esperanza. La sombra de lo que podrían hacer entonces los humanos, sus eternos enemigos, si se enteran de que la diosa los está castigando, los llena de malos presagios. La única esperanza para ellos, si es que aún queda alguna, se deposita en el vidente Néstor. El chico debe emprender un viaje lleno de peligros para despertar a Ferner, uno de los primeros licántropos, que ya avisó de que regresaría para la última batalla, la más importante de su raza.

Néstor no lo hará solo. Sierra es una licántropa a la que arrebatan su identidad por partida doble, no solo cuando la luna desaparece, sino también cuando deja de formar parte de la manada. Desesperada, hará lo que sea —incluso poner en riesgo su vida— para merecer otra oportunidad entre los suyos. Pero deben actuar deprisa: los humanos acechan y una diosa furiosa exige venganza.

En De lobos y dioses, Marina Tena Tena confecciona un relato sobre la ira, la búsqueda de la identidad y la sed de venganza. Nos gustó tanto que le valió una nominación para los Templis 2023 en la categoría de mejor novela nacional independiente.

Néstor y Sierra saben que no deberían haberse conocido; que están unidos, de alguna manera, por la imposición de las estrellas. Mientras él tiene un don, ella está maldita; mientras uno parece tener un camino trazado, la otra debe crearse uno desde cero. La historia se desarrolla en un vasto universo, cuyos secretos se van desvelando poco a poco, con detalles inquietantes y personajes con una oscuridad creciente en su interior.

El estilo es claro y conciso, acorde con la dureza de algunos eventos de la trama. Sin embargo, de la misma forma que a lo largo del viaje de Sierra y Néstor hay tiempo para descansar, tiempo para que incluso sobresalga la ternura, en ocasiones el estilo se vuelve también poético, quizá para encontrar la belleza en mitad de ese paisaje de desesperanza.

Otro aspecto que destaca es la mitología. La autora la desarrolla hábilmente a lo largo del libro, sumergiéndonos casi sin darnos cuenta en ese mundo lleno de peligros, por ejemplo, a través de los capítulos de páginas negras, donde encontramos historias del pasado que profundizan en las reglas del universo.

Marina Tena dosifica la información y también se guarda bajo la manga alguno de los secretos más preciados de su mundo. Esto hace que, como lectores, tengamos cierta sensación de equilibrio constante.

También hay que destacar la labor de edición de Fandom Books, tanto en la imponente cubierta de contrastes negros y dorados como en las ilustraciones para marcar los comienzos de cada capítulo.

De lobos y dioses es un homenaje a los licántropos y a todos los amantes de estas criaturas, pero también una buena puerta de entrada para los que quieran acercarse a ellos por primera vez.