Imagina una habitación totalmente cerrada, a cal y canto. Ahora añádele un cadáver, y después un hombre que pide auxilio desde dentro. Todo al más puro estilo de Agatha Christie, solo que en vez de estar en la Inglaterra de principios del siglo XX, esta habitación (con muerto y sospechoso incluidos) se encuentra en el alcázar de Córdoba junto a los aposentos del Califa Al-Haken II.

En este logradísimo ambiente árabe, se narra un misterio de asesinato verdaderamente enigmático. El eunuco favorito de Al-Haken, esclavo, amigo y confidente, ha muerto en su alcoba a manos, al parecer, del mozárabe Rodrigo Santibáñez. Él jura que nada tiene que ver con el crimen, pero no puede ofrecer una explicación de su estancia en el dormitorio del eunuco Sudri la noche de su muerte, ni de por qué es su puñal el que ha terminado hincado en sus entrañas.

Tras encontrarle en la escena de crimen, el califa llama a su médico personal, Hantal Idrissi, para que haga acto de presencia, pero este, acompañado de su hijo Fernando, se horroriza al descubrir las acusaciones que caen bajo su amigo Rodrigo. Además, las circunstancias del delito le resultan ciertamente extrañas, por lo que le ruega al emir diez días para investigar el asesinato y defender al joven cristiano.

SM nos trae de vuelta esta trigésimo sexta edición de El misterio del eunuco, Premio Gran Angular en 1995. En apenas ciento treinta páginas, la obra constituye una lectura amena y placentera, de ritmo rápido construido a base de intrigas trepidantes y una prosa ágil y personajes absolutamente únicos. Descubrimos cómo en un ambiente mayoritariamente masculino, la nobleza, la amistad y la sensibilidad son valores prioritarios. Además, dejando a un lado una trama secundaria de amor romántico, en esta novela el afecto más destacado es uno que no acostumbramos a encontrar de forma tan protagónica en la literatura juvenil, y es la de padre e hijo. El respeto y el cariño mutuo en perfecto equilibrio despiertan al lector una ternura excepcional. Esta novela nos trae una leve brisa de La leyenda del rey errante de Laura Gallego, pues une traiciones, secretos, mentiras y complots en una historia redonda que nos transporta a Al-Ándalus como nunca antes habíamos leído.