El instituto es un lugar de locos. Que se lo digan a Shirin, que, debido a las constantes mudanzas de sus padres, ha estado en cinco escuelas distintas en tan solo tres años. Ser la chica nueva no es lo único que la hace diferente; el pañuelo que oculta su pelo es todo lo que la gente necesita para formarse una idea preconcebida de ella. Los insultos, los comentarios racistas y las preguntas absurdas sobre su religión forman parte de su día a día. Ha pasado un año desde los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001 y, a los ojos de los estadounidenses, Shirin bien podría ser la culpable de la tragedia solo por ser musulmana.

En realidad, ya está acostumbrada; o, al menos, eso es lo que se dice a sí misma para no sucumbir al agotamiento. Solo tiene que seguir como hasta ahora —caminando por los pasillos con la vista al frente y unos auriculares bajo el hiyab— hasta escapar del manicomio que es la secundaria. Pero este año será diferente, porque se enfrentará a algo a lo que nunca ha tenido la oportunidad de acostumbrarse: que un chico se enamore de ella.

Hay muchas razones por las que una chica podría tener miedo a enamorarse, pero las de Shirin son, desgraciadamente, consecuencia de la islamofobia. Al otro lado del océano, publicada en 2018, es la primera novela contemporánea de Tahereh Mafi, autora de la famosa saga de distopía Destrózame, y también la más autobiográfica que ha escrito.

Esta historia posee todo lo que nos gusta de una novela juvenil: una protagonista con una voz potente y especial, un romance dulce y realista, y una crítica social, en este caso, al acoso que sufren las personas musulmanas por su religión o apariencia. La experiencia de Shirin, de familia persa, no pretende ser representativa de todas las adolescentes musulmanas, pero la manera en que habla de lo que significa el hiyab para ella o los miedos que el racismo ha implantado en su interior serán familiares para muchas de ellas.

Shirin es un gran personaje; amante del breakdance y de la moda, es una chica de la que querrías hacerte amiga. Aunque pueda parecer fría y obstinada al principio, rápidamente demuestra tener un corazón vulnerable. Esto lo descubrirá de primera mano Ocean, su compañero de clase de Biología y un personaje esencial en una historia que reflexiona sobre el privilegio: Ocean anima a Shirin a darle una nueva oportunidad al mundo, a no tener miedo, pero un chico blanco como él nunca entenderá lo que significa estar en sus zapatos.

Tahereh Mafi demuestra ser una experta en narrar historias de amor delicadas y hermosas y que, sin embargo, no parecen inalcanzables. Al otro lado del océano está ambientada en 2002, pero en muchos aspectos podría pertenecer al 2023: el uso del hiyab sigue siendo polémico en ciertas partes del mundo y la intolerancia, por desgracia, es difícil de erradicar. No obstante, la autenticidad de los personajes y el mensaje principal de la novela —que aún hay esperanza— no caducarán nunca.