En busca de un futuro mejor, Laila ha tenido que dejar atrás Nador, su hogar natal en Marruecos, y a gran parte de su familia, en especial a su madre y a sus hermanas pequeñas. Su padre y ella han viajado a Terrassa, un lugar donde podrá estudiar y aspirar a su mayor sueño: ser escritora. Sus esfuerzos pronto darán sus frutos y, a pesar de la barrera del idioma y el nuevo entorno, conseguirá progresar, hacer amigos y convertirse en una estudiante excelente.
Sin embargo, una terrible noticia destruirá su mundo. Y la cosa solo irá a peor. Con la aparición de su tía Karima, una mujer con una mentalidad tradicional en contra de que Laila estudie, y la dificultosa convivencia con su padre y unos nuevos inquilinos, Laila deberá enfrentar intrigas, inestabilidad y antiguos prejuicios sexistas vinculados a su religión que le harán replanteárselo todo.
Al final, lo vivido en Terrassa le hará aprender la lección más importante: la vida es un camino y nadie debe recorrerlo por ti.
Seiscientos euros es una novela impactante y sincera. Josep Gòrriz nos muestra, desde la perspectiva de Laila, el estilo de vida de muchas familias marroquíes que, pese a sus problemas económicos, luchan para que sus hijos tengan un futuro mejor. La obra retrata numerosos temas controvertidos, como el adulterio, la imposición del velo y el papel tradicional de la mujer en el islam de una manera convincente, e invita al lector a sacar sus propias conclusiones.
Su principal virtud es la capacidad del autor de situarnos de lleno en la historia de Laila. La joven marroquí logra que empaticemos con ella desde el primer momento y, conforme pasan las páginas, crece y cambia, ayudada por las personas que encuentra en su camino. Aunque quizá en algunos momentos el ritmo se hace demasiado lento, la obra brilla en la presentación de unos personajes complejos y bien construidos, así como en los valores que transmite.
La pasión de Laila por la escritura se convertirá en una meta y, a la vez, en una forma de expresión. La introducción de relatos que se intercalan con la trama, lejos de distraer, aporta más significado a sentimientos y pensamientos que, de otra manera, no se hacen visibles y proporciona originalidad a la narración.
Seiscientos euros es una historia breve, pero regala una dosis de realidad a todo aquel que abra sus páginas.