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Entrevista a...

Marianne Curley

El Templo #3 (abril 2008)
Por Javier Ruescas
5.861 lecturas
Son muchos los jóvenes que han disfrutado con las aventuras de Ethan, Isabella y Arkarian. Los elegidos, título de la primera parte de la trilogía Los guardianes del tiempo va por su 8ª edición y no parece que se vaya detener. Si disfrutaste con esta trilogía y con el libro El círculo de fuego, no puedes perderte la siguiente entrevista a su autora.

Después de Los guardianes del tiempo ¿piensas escribir más libros?

¡Desde luego! De hecho, ya he escrito dos nuevos libros. Ahora mismo están en manos de mi agente, quien está buscando editorial para ellos.

¿De qué tratan?

Uno de ellos es una novela contemporánea titulada Chains (Cadenas), que relata las vidas de dos hermanos después de que su madre fallezca. El más pequeño, Vince, intentará luchar contra esta pérdida revolviéndose contra el mundo con violencia; mientras que su hermano Julian comenzará a sufrir terroríficas visiones. Es una historia moderna de racismo y gangsters, pero sobre todo de amor, lealtad y coraje.

La segunda novela la he terminado hace poco y se titula Mark of the Pharaoh (La marca del faraón). Es una historia fantástica ambientada en nuestros días en la que dos jóvenes viven en una preciosa, pero peligrosa, isla. En esta isla, historia y magia se entremezclan para situar a estos dos jóvenes en el comienzo de un viaje donde descubrirán la verdad sobre ellos mismos y un misterio del pasado que aun está sin resolver.

¿Te gustaría ver tus libros en el cine?

Me encantaría ver mis libros hechos películas. Me han dicho muchas veces que mis novelas son muy visuales y que cada capítulo podría ser una escena de la película.

¿Te has planteado alguna vez escribir algo que no sea fantástico?

Por ahora, no, pero quizá más adelante escriba mi autobiografía.

Cuando escribes un libro, ¿cómo es un día normal en tu vida?

Un día normal comienza más o menos a las 7.00 a.m., de ese modo puedo estar a las 9.00 a.m. frente al ordenador. Después paso unas 6 horas escribiendo, aunque durante la primera fase de borrador nunca "apago?. Ideas, cambios en el argumento, conversaciones de personajes? pueden venir en cualquier momento, incluso de noche, por eso siempre tengo a mano un cuaderno para apuntar las ideas. Después de terminar el primer borrador, me dispongo a trabajar sobre él, puliendo detalles y comprobando hechos del argumento, la presión disminuye considerablemente y el trabajo no resulta tan intenso. Esta es la parte del proceso que más disfruto.

¿Cómo es tu proceso de creación?

Normalmente empiezo sentándome y pensando sobre los principales personajes. Una vez que tengo una idea visual de su apariencia, les coloco en un lugar y en una situación determinados. Con Los guardianes del tiempo, visualicé primero a Ethan y supe desde el primer momento que quería contar la historia de tres personajes principalmente, dos de ellos hermanos -Isabel y Matt-. Y mientras determinaba sus personalidades me dije que tendría que escribir un libro para cada uno de ellos.

 

¿Dónde escribes normalmente?

He habilitado una habitación en mi casa con una mesa, un ordenador y varias estanterías llenas de libros que puedan serme útiles. Lo llamo "mi oficina de casa". Está situada en la parte frontal de la casa y tiene una enorme ventana que da al bosque de arbustos que cruza la carretera. Normalmente hay koalas trepando por los árboles y más de una vez me descubro intentando ver alguno. Normalmente utilizo ordenador para escribir las novelas, pero al final termino escribiendo montones de notas en hojas a mano.

¿Quién leyó por primera vez tu primera novela?

Mi hija Amanda, con trece años. Ahora tiene veinticinco pero sigue siendo la primera en leer los manuscritos.

¿Cuántos libros escribiste antes de El círculo de fuego?

Escribí cuatro libros antes que ese. Ahora los veo como novelas de entrenamiento. Aprendí muchísimo con las correcciones que recibí de las editoriales a las que los mandé y no los publicaron.

¿Qué pasó con ellos?

Aún los tengo en el ordenador y también en hojas impresas, pero nadie los leerá ahora. ¡Son demasiado vergonzosos!

¿Qué les dirías a los nuevos escritores?

Que tengan seguro que escriben porque saben en su corazón que no serían felices haciendo otra cosa. Escribir puede resultar verdaderamente complicado y es difícil hacerse un hueco, pero si es eso lo que de verdad les apasiona, a dispensas del dinero que ganen o dejen de ganar, el premio será enorme.

¿Qué tipo de literatura te gusta leer?

Me encanta escribir para lectores jóvenes y he leído muchas novelas de este tipo escritas por autores de todas partes del mundo, pero mi género favorito es la ficción histórica.

¿Qué opina tu familia de que seas escritora? ¿Y de tus libros?

Mi familia está muy orgullosa de mi trabajo. Creo que mi marido es mi mayor fan. ¡No puedo utilizarle como corrector de ideas porque no es nada objetivo conmigo! A mi hijo Chris y mis hijas y sus maridos les encantan mis novelas y siempre que tienen ocasión se las pasan a sus amigos.

¿Qué haces cuando no escribes?

Cuando no estoy escribiendo, leo. Solía pasearme por las playas de donde vivo, pero desde mi enfermedad y la lesión posterior no he podido volver a andar por la arena, así que ahora paso el tiempo libre haciendo fotografías. Por las tardes me gusta disfrutar con una buena película. También me gusta tejer.

 

Sabemos que estuviste enferma de mielofibrosis y que por eso tuvimos que esperar más tiempo del habitual la tercera y última parte de Los guardianes del tiempo: La llave. ¿Qué puedes contarnos sobre esta terrible experiencia? ¿Aprendiste algo de todo ello?

Casi toda la gente que había en mi hospital sufría de leucemia y muchos esperaban un trasplante de médula. Una noche 3 personas murieron porque un germen se coló accidentalmente en las manos de un visitante que no se había lavado previamente las manos. Recuerdo cómo les afectó a los médicos y a las enfermeras que nos cuidaban este hecho los días siguientes y me di cuenta de que me había convertido en parte de una enorme familia que cuidaba de todos como si nos hubiésemos conocido de toda la vida. Me di cuenta, sobre todo, de cómo el espíritu humano prevalece incluso en las condiciones más difíciles. Conocí a gente muy valiente durante mi estancia en el hospital, y aunque cada persona estaba viviendo en una continua amenaza de muerte, se las arreglaban para reír y bromear siempre que podían. Fue allí donde aprendí que la vida es tan frágil como una tela de araña, pero para no vivir una vida vacía, no debemos pensar en lo frágiles que somos, debemos aventurarnos más allá de nuestros límites, probar nuevas cosas y llegar tan lejos como podamos. La experiencia de la mielofibrosis ha hecho que me sienta agradecida por cada nuevo día que se me brindaba, y a apreciar la belleza este planeta.

¿Te inspiró la experiencia de alguna manera para tus nuevos libros?

Escribí la novela Cadenas con la pasión que saqué de mi experiencia con la enfermedad. Por las personas que conocí en el hospital y por las historias que me contaron, sentí que había conseguido entender qué sería la vida de unos adolescentes que viven con el miedo de perder a alguien preciado y muy necesario en sus vidas.

¿Qué opines de la nueva literatura para jóvenes? (Harry Potter, Eragon?)

La nueva literatura para jóvenes me parece maravillosa por el hecho de que está dirigida tanto a chicos como a chicas, y también a adultos. Ha hecho evolucionar la literatura juvenil en todo el mundo y la ha colocado en una posición tan elevada como la de la literatura para adultos. Además, ha hecho que lectores que no habían cogido un libro en sus vidas se interesasen por ella.

¿Alguna vez has pensado visitar España?

Soy consciente de que tengo muchos fans en España y me encantaría poder visitar el país. Mientras estaba en el hospital, y debido a la quimioterapia, mis huesos se volvieron frágiles como un panal de miel. Tres semanas después de que me hicieran el transplante, me caí de una silla y me rompí tres vértebras de la espalda. Tuve mucha suerte de no dañarme la espina dorsal, pero desgraciadamente ahora tengo cuatro discos rotos y una espalda permanentemente curvada. Debido a la lesión solo puedo viajar largas distancias en primera clase y, ya que estos asientos son tan caros, no he podido aun viajar fuera de Australia. Espero que una vez que mis novelas se hayan vendido a las editoriales, pueda pagarme el viaje, ¡y os aseguro que España será de los primeros países que visite!